Monday, November 21, 2005

Tiempo

Desperté a la mitad de la noche, prendi la tele pensando que estaba desvelado, y un anuncio decía "Hoy, 25 de Agosto de 2321, se cumplen 100 años de la llegada del hombre a Plutón", mi mente se llenó de interrogantes, ¿Qué hacía yo ahi?, si me habia acostado hacia 316 años.
Recorro mi casa, todo estaba como lo había dejado, voy al espejo y descubro que no había envejecido ni siquiera unos años. Una nota en la mesa decía "9 hs entrevista de trabajo", y estaba escrita la dirección del lugar, pero estaba llegando 316 años tarde a esa entrevista. Teniendo en cuenta que no recordaba haber escrito ese papel, y que tenía mi letras, la curiosidad se apropió de mí y despues de sacar los millones de cartas, impuestos, cartas documento y demás papeles y volantes de publicidad de abajo de mi puerta, salí a recorrer.
Contrario a mi idea del futuro, todo era sombras. Poca gente caminando. Pocos autos. Pocos negocios abiertos. Todo era poco. Camino hasta el lugar, con miedo, ya que eran las 9 de la mañana y no habia sol. Entro al lugar y me presento, una secretaria busca en la computadora y me dice que me estaban esperando hacía 316 años, que tome asiento y espere. Miro alrededor y no habia ningun sillón, y como la chica se quedó mirandome como esperando que me sentara, lo hice en el piso.
Esperé mucho tiempo, solo, sólo mirando a la secretaria escribir con una sola mano y fumar (algun tipo de cigarrillo desconocido para mí) con la otra. A las 4 horas me dice "Pase, lo están esperando".
Camino por 3 pasillos a media luz y llego a una inmensa oficina donde un hombre de larguisima barba y voluminoso cuerpo me atiende.
"Buenos dias, sientese", una silla estaba en la otra punta de la oficina y cuando estaba yendo a buscarla me dice "¿Que hace? sientese en el piso, por favor", él se levanta de su sillón de empresario y se sienta conmigo en el piso.
"Lo estabamos esperando, pero me gustaría escuchar la historia contada por usted" me dice calmado y tomando una bebida rosa. Yo le explico la historia y me interrumpe diciendo, "Es natural, ese dia fue el dia de la bomba", sin entender le pido que me explique que era lo que habia pasado. Entonces comienza con su relato: "Hace 316 años, una bomba de otro planeta, que no pudimos detectar en el sistema solar, cayó y muchos murieron, salvo 2 personas, una sos vos y otra hace 5 años está desaparecida...". Me paro y camino unos pasos hacia atrás mientras el corpulento hombre de barba sigue con su relato "...Nosotros somos un grupo de médicos que estudiamos el por qué de semajante fenómeno. Hace 5 años cuando la otra persona despertó, no fuimos lo suficientemente cuidadosos y no supimos que su vida valía tanto...". Eso quería decir que yo estaba en peligro y que ellos iban a ayudarme. El hombre no paraba de hablar y entre mis pensamientos y sus palabras, iba perdiendo algunas des sus palabras "...es por eso que dejamos esa nota en su mesa, ya que despertarlo no era lo recomendable por una razon obvia...". Era sospechoso todo ésto, alguien desconocido quería ayudarme, pero su última frase aclaro un poco todo "...con esa muestra de sangre y su testimonio vamos a poder descifrar que fué lo que pasó en realidad y vamos a entender las razones que tuvieron los alienigenas para bombardear el planeta".
Yo era útil para ellos y eso me hizo sentir tranquilo. Llego a un laboratorio y varias personas de lentes me hacen sentar, me sacan sangre y me hacen preguntas acerca de mi vida, mi nombre, mis cosumbres de alimentación y esas cosas. Ahi recordé que esa noche yo no habia dormido en mi casa y todo se volvió más sospechoso. Hablaban lejos y yo no escuchaba, solo intentaba leer los labios de alguno. A las 3 horas uno se acerca y me dice por lo bajo y disimulando, "Al final, no eras vos el otro elegido, corré" y otro le dispara con en la nuca. Yo salgo corriendo, ellos no me siguieron, parecían tranquilos. Me pierdo entre los laberínticos pasillos del lugar, bajo y subo escaleras, entro por puertas que daban a diferentes habitaciones vacías y oscuras, hasta que llego a la oficina del ya muerto hombre de barba, ahi supe que mi vida estaba por terminar.

Tuesday, November 15, 2005

El Prófugo

Hipnotizado por el sol del desierto que ya era casi fuego en su piel, sentía que cada movimiento le creaba una nueva herida en su cuerpo. Muchos días habian pasado desde que escapó de la muerte, pero lo que vivía era algo muy parecido. Caminaba y caminaba y sus ojos no tenian respiro de ver siempre exactamente lo mismo. Kilómetros y kilómetros de arena en todas las direcciones y su pierna le dolía luego de haber recibido los latigazos.
La noche no parecía llegar, pero en menos de lo esperado todo era sombras y silencio. Se durmió sobre su tesoro, ese mismo tesoro que casi le cuesta la vida, ese tesoro que lo hizo perder todas las otras cosas que quería. Al dormirse, sus sueños eran una pesadilla tan parecida a su realidad que despertar no lo salvaría del sufrimiento. Finalmente, lo negro pasa a rojo hasta que sus ojos se abren y vuelve a la realidad, pero también a su sueño, a su peor pesadilla.
A esas alturas la resignación era la encargada de manejar su mente y el miedo se habia quedado alvidado en aquella prisión, junto al martillo y los barrotes rotos en el piso.
En un momento una gran roca que era suficiente para hacerle sombra le sirvió de refugio y se encerró de nuevo, pero ésta vez en un lugar infinitamente gigante, su mente, la cual empezó a hacerle juegos. Primero se sumergió en culpas, que lo hacían lamentarse, luego en odio que lo hizo romper su tesoro tan preciado, luego en tristeza, que lo hizo llorar, hasta que la alegría de creerse libre lo hizo reir durante horas. Luego sintió pasos y voces, pero al levantar la vista no había nadie alrededor, al igual que en un principio, pero sin su tesoro.
Luego llegó la noche nuevamente y con ella de nuevo la resignación, las culpas, el odio, la tristeza y la alegría.
Pasados ya muchos días de su escape bajó al infierno y nunca se fue de ahi.

Los Cuentos de Imaginolandia

Bienvenidos a Los Cuentos de Imaginolandia, donde van a encontrarse con Cuentos, Fábulas y Ensayos, además de otras cosas que nos van a ir saliendo a Manux y a mi mientras vayamos escribiendo.
Vivan en carne propia cada una de las historias de éstos personajes y tengan la posibilidad de volver a leer los cuentos que no entendieron, jejejeje.
Reescrituras, homenajes, parodias, creaciones propias van a ir poblando la pagina para en algun momento convertirse en libro y que en otoño se caigan sus hojas.